I
busco
sin suerte
mi lugar
en el bosque
ignorada recorro
los senderos
entre árboles adustos
punzan los pájaros el cielo
este paisaje
es perfecto
nada le falta
nada le sobra.
II
bajo mi pie
una hoja
desmenuzadas
las dos
en leve
polvo
ocre
sólo las nervaduras
nos perduran
obstinadas
a la espera
del invierno.
III
nieva
cada
copo
cae
pausado
milimétrico
en el espacio
preciso
que le ha sido
asignado
a ese copo
en este mundo.
IV
he visto llorar
en primavera
al árbol
la gota fragante
de resina
pendiendo del ojo
áspero
nadie debiera asombrarse
de esa lágrima
también los árboles
nacen
crecen
procrean
y lloran
como cualquiera.
V
fiesta pagana
en el cielo
el bosque
se ha vuelto
noche
boca de lobo
mi boca
elevo
una plegaria
apócrifa
para un dios
que no merece.