Poemas de Fabiana Jakubowicz

SUS MANOS ERAN DE BRUJA (El andamio ediciones, 2022)

“Sáqueme el miedo, abuela, hábleme
de las leyendas del viento”
Tom Maver

I
Mi abuela cambió su voz

sus manos se estaban muriendo
pero ella no lo sabía
en el barro de la verdad
sus manos eran de bruja

sentada en una silla
iba entrando en el redondel
iba queriendo parirse al revés

daban miedo
ciegos los ojos
podían verlo todo

allá nos vemos
parecían decir

II
puse al bebé
sobre su regazo
un bebé de leche

sus manos viejas
se convirtieron
en ramas de ombú

mi abuela
hundió los pies
en el fondo del océano

un maremoto
sacudió al planeta
y por un instante

los viejos del asilo
se pusieron a surfear
con sus sillas de ruedas

las mejillas del bebé
habían tocado
sus mejillas

III
unos dedos
tamaño hormiga
piden pista se meten
buscando oro
en la grieta profunda

para los dedos
de un bebé
las arrugas de la anciana
son un tesoro

IV
mi abuela brilla

pícaro diamante
vaticina

esta nena
va a tener
el carácter fuerte
de una yegua

HIJO DEL PRECIPICIO (Inédito)

I

Está cansada
la loba
de tantos cachorros
llorones y hambrientos
al blanquito
no lo quiere
porque un lobo albino
es un ser de las nubes
y los lobos
son de la luna

lo arroja
desde lo alto
de la montaña
cae
choca
contra la ladera
roza el gran cuerpo
lo toca
en cada golpe

es un hijo del precipicio

su madre
será la caída

el vértigo
su leche escarpada

la montaña lo confunde
con una roca
una de todas
las que se avalanchan
en otro tiempo
que las demás

quisiera la montaña
protegerla
darse vuelta
pedirle a la tierra
que se apure a girar
y devolverla
a la cima

no es una roca
es un lobezno albino
eso que cae
en el tiempo lento
de lo que respira

II

el granizo
sobre el techo
del orfanato

en sus camas
se tapan la cabeza

el granizo
contra los vidrios
hace entrar
su intemperie
en la habitación

se acurrucan
se hacen un nudo
para tocarse a sí mismos
para bastarse a sí mismos

un niño
raspa con las uñas
la madera de la cama

desprende
pequeñas virutas
las redondea
una a una
con la yema de los dedos

aguza el oído

y logra escuchar
el impacto
cuando las suelta

tantas veces
se durmió tocando
el lóbulo de la oreja de la madre

el lóbulo era
un pétalo delgado
que cabía
entre los dedos ínfimos
de un bebé

y la piel estaba
redonda
y era redondo
el orificio
entre los labios
y era redondo
el pezón

ahora en las uñas
quedan
virutas
de madera

¿cómo suena
una partícula
invisible
al caer?

cuando se lo lleva
la asistente social
el niño
es una viruta de madera
en las uñas de la madre
la madre es también
una miniatura
que se aleja
desde la ventana
del auto
miniatura
el lóbulo rosado
todo el cuerpo
de la madre
un resto de aserrín
una piedra de granizo
que golpea
rompe la ventana
y un sol rabioso
acribilla las nubes

¿cómo suena
una miniatura
de madre
cuando cae
de los dedos
de un niño?

es un lobezno blanco
en una cama
con mantas marrones
como pieles de lobo
que lo cubren

III

Así como la loba
ama mientras mata
el sol
besa la yugular
de los pastizales secos

el sol
que para amar
tiene brazos de fuego
el pobre sol
traspasa la piel

los padres
untan al niño
con bronceador

asi como la sangre es
para la loba
una flor de membrillo
así como su aroma
se le mete hasta la médula
el sol no puede detenerse

los padres untan al niño
con piel de lobo
para cuidarlo
de ese amor
pero el sol
atraviesa las paredes
del orfanato

IV

es un sol
el aullido de la loba
un sol que grita
y arrastra como un cometa
su larga cola de llanto
por todo el cosmos

una luz de loba llega tenue
como un aullido lejano
hasta la cama
donde duerme
el niño

su mano cuelga
como si flotara
las partículas de luz
se entreveran con sus dedos

el niño sueña
que la montaña
lo hamaca
ida y vuelta
en un vaivén
del que jamás
caerá

Biografía

Fabiana Jakubowicz nació en 1970 y reside en Buenos Aires. Psicoanalista, poeta y cantautora. Fue cantante, compositora y tecladista en las agrupaciones: “Almarupay” y “Musinautas”. También formó parte del dúo “La hilacha” (canciones y musipoemas del desatino) y actualmente presenta la obra performática Raras especies, con el auspicio del Fondo Nacional de Las Artes. Publicó “Como un yuyo brota” (Editorial Niña Pez, 2019), que generó una serie de videopoemas realizados en colaboración con la cineasta Claudia Averbuj y “Habrá sido un presagio” (El andamio ediciones, 2022). Es integrante del colectivo “Poesía al fuego” que organiza varietés en distintos espacios culturales y también integra el trío performático “Señora monstruo”.