Poemas de Gabriela Goldberg

Textos pertenecientes a un libro inédito: Villonario

De lo que fue

                  el marco de la culpa es retorcido
tendencioso hacia mí misma
                          como el punto
             donde clavo el compás para hacer círculos
2 cuadras
304 pasos
           de tu casa a la redonda
cuántas sílabas hay en 6 palabras
3 noches
               de 2 horas despierta
buscando simetrías

Aguirre 921

entré silbando mi nombre musical
vos diste todo el mar
que me rodea
balanceo
               subiendo con la mano en el bolsillo
       de a 2 los escalones

un vino en la otra mano

  piso 3

Al raso

para no olvidarse anota acá
cuántos se encuentra
hay siempre otro
que aparece
                     en un colchón
que se deshace con el peso
de la gente que con hambre
pesa más?
cuando se cruza
de vereda sin mirarlo aunque se fije
                          de reojo
cuenta 5
en la heladera
hay muchos más
avisos de comida que las ganas
de sentarnos juntos
a comer

Las tías

otro domingo entero el día más largo
de ituzaingó a belgrano atrás, medio acostada
                      rivadavia hasta cruzar
                                   la vía

un bizcochuelo de naranja marca el centro de reunión
la falda tibia y esponjosa cuadrillé como el papel
en la pared del comedor va hacia la mesa
un plato ámbar en las manos de mi tía

y ahora los nudos en los dedos como astas
desprendidas sobre un cuerpo
echado entre las flores
vulnerable

el pañuelo ya estrujándome el meñique y sigo dándole
un anillo que nos junte para siempre, un libro mío
que deslizo en el cajón medio a escondidas
te acompañe

ya lejos de la casa
de un día para el otro un hospital, Vicente López,
entré buscándola sin verla entre las otras
sin la prótesis, perdí
su cara y
ella vio mi desconcierto
y me lo dijo bajito al acercarme

trae la pata de pollo bien dorada
cuenta novios que no tuvo
habla de cartas que yo encuentro años después
en el pasaje
siempre con la hermana
antes la madre ahora con el gato que se esconde

se juntan cada vez a cocinar
                para las fiestas
llevan pollo
      relleno
lo deshuesan sin cortar
la piel
como una bolsa

un corte justo donde entra
el ala
         se abre el pollo por abajo
cuando asoma
que se fueron hace poco
la carne de los muslos llena el hueco
dando al pollo la forma
que anotaste con tu letra cuidada y yo que leo
en horno suave, como abrazo
1 hora y media

Suburbana

cambié de asiento
una mudanza en mi carácter
no seguir mirándola moverse y pretender no incomodar
la agitación con la que sube
                   al 543 Bis ex línea 545

la recorre
hasta pararse con la intensa comezón que se refriega
en el respaldo de cuerina del chófer

ni putearla le sale abrir la puerta
pastizales
y la tierra se golpea una vez más cuando se tira

y se levanta del paco y la resaca emocional

quizás, al otro día

Biografía

Gabriela Goldberg nació en Buenos Aires en 1963. Publicó “Miserere” (Editorial Rayuela, 1991), “Parranda” (Vox, 2010), “Cuentovejas” (Huesos de Jibia, 2015) y “Con un perro corriendo atrás” (Editorial Rangún, 2018) . Es psicoanalista y ha hecho traducciones para revistas y sitios de literatura.