Poemas de Lucila Benac

1
ay, mi hambre
dinamitada por las ganas
¿qué pasa si abro la boca
y digo viento?
y te acaricio sin manos y te miro
sin ojos
me reservo la lengua
para tu desesperación
mirame con la boca palpitante
mientras temo y tiemblo
porque sé:
en algún momento querré
meter un trozo de mi corazón
justo al lado del tuyo
aunque sé:
no podemos hablar
un lenguaje extranjero
tu corazón es tuyo
de alguien más que todavía no
existe
el mío es mío
y diré viento
a escondidas

2.

invertida me siento
como una criatura esperando
a que la vayan a buscar al jardín


sé que, de donde sea que esté,
tengo que volver sola

3
cada paso es acrobacia

puedo doblarme entera
hacer de cuenta que soy la estrella de un circo
bailar entre tigres domados
soltar las piernas como trenzas de seda
bajar al suelo con gracia y despedirme sin ver
nada en absoluto
que los reflectores y el fuego lo tapen
todo
estrujarme sin que nadie me vea
mientras los aplausos me aturden y el piso
se hace negro

4
no lo quiero
lo anhelo si me lo dan enloquezco
quiero más
temo que me lo arranquen, que sea mentira
es un peligro: si digo quiero amor me asusto
te asusto asusto a todos
lo que era un juego se transforma en una carrera
de ciegos dando manotazos al aire
¿quién da más?
que levante la mano
puedo divertirme en la inocencia
pero el calor es distinto, el abrazo es distinto
dos manos sobre mi cara mutan
en filosas hojas de papel
no es la culpa de nadie. No sos vos
soy yo los montones
de caricias que fueron sopapos sobre la boca
letras de amor condicionadas por mi
conducta
si te portás bien te amo
si me decís que sí te amo
si dejás que te parta al medio y te abra y te coma
te amo
si odiás a tu madre te amo
si te morís conmigo: te amo


no sos vos, soy yo
metiéndome hacia adentro buscando
los pedazos de vidrio roto atorados
en la cuenca de mi estómago
soy yo inventando palabras
que digan distinto
diciéndome: te amo te amo
te amo aunque no hagas nada
ni te partas aunque digas que no
que no sabés que no querés
aunque no quieras morirte: te amo
el amor tomará la forma de pájaros
que se van yo seré el amor
enraizado en la tierra
voy a nacer flores nuevas
tomar de los brazos que me sostengan
minutos de silencio
de los besos pequeñas bolas
de algodón aunque desaparezcan
voy a dejar que me rocen el pelo
que me dibujen con la nariz en la espalda
una frase que diga:
«ahora me quedo»
que el momento sea suficiente aunque
de vez en cuando vomite polillas con un ala rota
y llore
voy a tomar lo que me den en forma
de pastillas de azúcar
un corazón disolviéndose en la boca
soy yo

5
mi amiga se está vistiendo estoy
sola en una fiesta de extraños
hay un niño dibujando sobre la mesa
donde se sienta la jarra de vino
miro sus trazos firmes
sabe lo que quiere dibujar y se
nota
choca el lápiz contra la mesa
al ritmo del tecno que desprenden
los parlantes
quiero que alguien venga a
hablarme de cosas que no sé
tomo un sorbo de vino ya tomé
unos cuantos
hay algo de lo desconocido que
me llama es donde estoy
ahora
que me desconozco a mí misma
quiero besar a alguien esta noche
y sentir un miedo dulce
que desprenda brillos
el niño dibuja un hombre
con sombrero
quiero decirle que está muy bien
que parece el dibujo de un adulto
pero me quedo cerca
sin decir nada
sorbo vino
me muevo
mi amiga no vuelve y yo
ya vi los mismos rostros algunos
me miran de vuelta
no sé qué hacer cuando me miran
quiero jugar
en la perfo mi amiga se encarga
del sonido
canta como si al nacer alguien
la hubiera tocado con una nota musical
dos chicas se frotan levantan
respiran agitadamente es una respiración
pensada
para nosotros
los otros los que miramos
también queremos tocarnos
flotamos
pienso que en cualquier momento alguien
se va a sacar la ropa y va a usar las sogas
para atarse
los nudos me excitan
las velas el olor a lavanda
parece un ritual de luna: hoy se pone llena
en un signo que nos hace llorar
me pregunto si esta fuerza desprendida
por dos cuerpos nos pone a todos
igual
quizás yo sólo estoy
caliente
en el baño un tipo se mete a
tomar merca mientras me bajo
el pantalón
casi le digo quedate y te miro
pasame la lengua cristalizada
por los dedos que tu aliento
blanco me humedezca
la pelvis si me apoyo
en el lavamanos
afuera suena música
hay imágenes en las paredes y pequeños
universos vibrantes en cada rincón
pienso en quién hubiera sido si
me hubiera permitido el desbarranco
sin control
hoy no me pesa soy alguien
que no conozco y
sólo quiero estar tranquila
mientras el niño dibuja hombres
de saco y las velas brillan y
nadie sabe dónde estamos mientras
esta casa se suspende en
el espacio negro y nos miramos
como si nada importante estuviera
ocurriendo

Biografía

Lucila Benac es redactora y licenciada en Comunicación Audiovisual. Como periodista cultural escribió para plataformas como Simbiosis Cultural e IndieHoy. Lanzó dos fanzines autogestionados, “Fricciones” y “Salvaja”, que reúnen textos poéticos y fotografías de su autoría. Actualmente está escribiendo un guion para teatro.