El futuro
Casi todas las noches
me voy a despedir
a un puerto
tejo y destejo
el tiempo a mi antojo
como a un pez moribundo
el deseo es una fruta
en la boca herida
la fauna en el libro
de un niño deslumbrado
el futuro un pan
que amaso
con el cuerpo en reposo
y el pulso
incubo
la simplicidad del sustento
una suerte de gesto primitivo
detengo
con la mecánica de mis ojos
esta imagen
el puerto el mar los letreros
abrazo el sonido el calor
de una madre adoptiva
que me desenreda la lengua
y me llama por mi nombre.
Nevoeiro
Hay una ventana con la luz abierta
y nos espían dos veces
ya vimos el nevoeiro
subir y bajar como los templos
acercársenos e irse como una espada rota
y roja en una mano quebrada
me lo señalaste varias veces
y sentí cómo tus palabras precedían el acto
poco después sentimos la cara mojada
condensación de un conocimiento del mundo
de una parte sustancial del mundo
de esta ciudad que mengua entre las pieles.
Las casas
Las casas llevan en sí
el brillo reverso del pulso
la vida paralela
que allá afuera transcurre
como un gusano lento
ya no hay afuera ni adentro
el signo muere o se ríe
pero siempre hay arriba
y abajo
algunas casas
chorrean sus dolores
atraviesan el tiempo
ya no las habitamos
pero duermen en la sien
como un gusano sonámbulo
que se estira
de la cabeza al vientre
del vientre a la cabeza
algunas casas
nos recuerdan
lo que fuimos
capaces de ser
y lo que hicieron de nosotros
mi casa está repleta de flores
ríos montañas terrazas
no tiene puertas al abismo
guarda una luna inmensa
con sus tormentas circulares
me recuerda
lo que soy
capaz de ser.
Verdes anos
Acima dos 35
as escolhas são flechas lentas
no centro de tudo
a gratidão um pão que se amassa
com o corpo com o fardo
com potência
nada é grátis
meu amor
ou se calhar tudo seja
ser anfíbia de terra seca e alta
fará de ti um animal mais forte
mais recuado mais fundo
o mesmo riso com quatro horas
de distância
mas o espírito exagera
meu amor
o corpo fraqueja húmido
no esforço de oferecer
um contorno à mágoa
não o anfíbio
não as raízes
não a solidão:
é crescer e envelhecer nos limites
da carne acesa que dança
e no fim do dia
num mundo destruído aberto
sublimedeita-se.
deita-se.
Lengua madre
Leo poemas
para escribir poemas
un robo a tientas
por proximidad de palabra
una pequeña succión de sangre
escribo porque tengo sed
estaba en cuarto grado
y la maestra nos mandaba
a escribir poemas
tuve esa suerte
de chica
la bandera y su patria me dictaban
versos de rima estricta
para que descubriera
que mi vida nacía de la lengua
como de un ombligo
solar y métrico
y que la vida
me pasaba la lengua por los labios
para que yo le escribiera
a luz de luna
desvelada
cuando escribo
me lamo a mí misma
y así me nacen las heridas
años más tarde
descubrí la infidelidad
en varias de sus formas
y me olvidé por momentos
del lenguaje quieto
que había nacido conmigo
y me apropié de un código extraño
que se parecía mucho
a mis construcciones
tiempo después
tuve que abandonar
la lengua ajena y constelada
para sentir esta sed
para escribir en este
mi códice antiguo
y palpar el sabor ácido de la madre
ese agua única
en donde nadar
algunas noches
con los astros en la boca.