Poemas de Sampler, inédito.
Con Jurassic Park
lloré, incluso, de miedo
incapaz como me sentía
de enfrentar el avance
el rugido de las bestias
Papá intentó calmarme, me dijo
Son máquinas y efectos, todo esto
no es nada más que una película y yo
me puse furioso
pensé, ¿nada más
que una película? ¿cómo qué
nada más que una película?
Su frase encendió
el fuego del odio y la bronca
la ira contenida contra mi padre
pero también es cierto que
sin esas palabras
un poco torpes o secas
ahora no podría
levantar la vista para ver
con mis propios ojos
todo el esplendor
la gloria toda
Tiranosaurus Rex
la furia y la tristeza
la enorme soledad
aquellas bestias magníficas
Como un lodazal barre a su paso
con un pueblo entero, así
bajaban los gritos de mis padres
por las escaleras
como agua y tierra y la furia
de la gravedad o parlantes desconados
mientras Cobain está cantando hello, hello
hello, how low?
hello, hello
hello, how low?
y aunque todavía faltan diez años
yo ya estoy agitando la cabeza
ya tengo 18 y soy uno más
uno entre tantos animales pesados
huyendo del barro, indómito, en la plenitud
de su instinto de supervivencia
trato de demorar al máximo
nuestra despedida
Preparo un té que no pediste
te recuerdo que todavía
queda un poco de helado
Finjo que pierdo las llaves
o que conozco un colectivo
que viene mucho más rápido
aunque solamente lo digo
porque su parada queda
un par de cuadras más adelante
Finalmente me resigno
abro la puerta y te acompaño
Cada vez que te vas de casa
me tiro en la cama
y no siento ni frío ni calor
como una lámpara
o una simple jarra de vidrio
habito en silencio y sin movimiento
un enorme cuarto vacío
Si el campo somos todos
que lo repartan
Tiene usted toda la razón
la poesía no sirve para nada
la poesía es pérdida
derroche puro gasto
pájaros que se refrescan
en un charquito de lenguaje
Bustriazo Ortiz era
radiotelegrafista
O’Hara manejaba un sonar
en medio del océano en
plena Segunda Guerra
y Juanele iba
del río hasta el Correo
ida y vuelta, quién pudiera
enviar aunque sea
un simple mail y que llegue
a quien corresponda
Nuestra lengua
invasión alienígena
norma, sistema y nieve
cae
y en su cadencia fulmina
todo lo que toca
y yo
una máscara
un traje espacial desesperado
Patricio Foglia nació en 1985 en Buenos Aires. Publicó los poemarios Temperley (2011), Lugano 1 y 2 (2014), La escafandra (2015), Tokio (2017) y Todo lo que sabemos del cielo (2018). Prologó y antologó Los fuegos de Orc (antología de poesía argentina y ciencia ficción) y Una marca de nacimiento (poesía y filiación), editorial Mágicas naranjas. Tradujo, junto con Natalia Leiderman, Salto del ciervo (antología de poemas de Sharon Olds), El pájaro rojo y El trabajo del sueño (poemarios de Mary Oliver). Fue guionista del podcast Mostras – Maestras de la Poesía argentina. Poemas suyos forman parte de diversas antologías y blogs.