de El pétalo incaible (Halley Ediciones, 2023)
Sol en Escorpio
De las profundidades
emergés
debiste atravesar algún desierto
para tanta afinidad con
lo introspectivo
oscuro y silencioso para muchos
cuesta un trabajo
llegar a ver tu luz
quienes te gobiernan
de virtudes te proveen
¿por qué, entonces, de todo te defendés?
el guerrero Marte
te anima a todo
el lejano Plutón
te invita a transformarte
¿no es hermosa esta danza cósmica,
coreografiada por un poder
que surge del pantano de los cielos?
noviembre te celebra
tu festejo es siempre
puertas adentro
Enigma e Intensidad
son tus anfitriones
no domines ni ataques con tus pinzas
invitanos a tus aguas
adivino un tesoro bajo ellas
que la noche de tus luchas
sea himno de tu sol
Neptuno
tu lejanía
pequeña y helada esfera
ejerce sobre mí
un magnetismo
dios del mar
regís la energía
de lo etéreo la fantasía la ensoñación
mi agua es otra, Neptuno
aunque creo que
tu tridente busca
la profundidad
que tengo para darte
a lo mejor
todas las formas del agua
nos alcanzan
a lo mejor
el universo no nos pide
explicaciones
echados
sobre el polvo de estrellas
vos en mi piel
siento la gravedad del sello
la prueba de que
la distancia es ilusión
de que todo
en algún punto
es una misma cosa
Inéditos
es muy temprano
tanto
que la luna tenue
se confunde
con el esbozado sol
eso a mí no me importa
a lo largo de mi vida
me han dicho nube
queriendo decir hoja
me han pedido sal
buscando un simple pez
en fin
aunque le ponga empeño
no soy una adivinadora
es muy temprano
y la veo
transita por sagitario
flechas de fuego clavadas
en su rocosa superficie
el firmamento, impasible
pero hay algo que me desconcierta
el sol
esbozado como dije
se va acercando a ella
tanto
que titubeo y pienso
¿será su amigo o su rival?
a juzgar por la fuerza
un león entre las aguas
podría dominar
el escenario marino
pero este león
juega con los peces
que atraviesan su melena
en un gesto fugaz
Poseidón con su tridente
agita el mar
y el león, perturbado
vuelve a la superficie
¿habrá entendido la señal?
en la profundidad
los peces nadan en círculos
la espiral se eleva
frágil como el sueño
salen del agua
por un instante divino
mirando al sol
a lo lejos se oye
la música de las olas
a veces estridente
otras, apenas un rumor
el agua
suele traerme
respuestas a mis preguntas
era muy temprano en la mañana
y tenía la mente calma
virgen de los tormentos
que suelen venir
con el pasar de las horas
cuando una olita
fresca y joven
arrimó a mis pies
un cangrejo
una criatura que había visto
cientos de veces
en libros de biología
en el mandala zodiacal
pero nunca en la vida
así tan real
como ahora lo es
sumergida
a pocos centímetros
de mis pies
con sus pincitas
en reposo
y el brillo del sol
cubriéndola
entonces formulé
para mis adentros
una pregunta
como si el cangrejito
fuera una carta de tarot
o vaya a saber uno qué
y cuando cierro el enunciado
con el debido signo de interrogación
una avasallante ola
alta y vanidosa
interrumpe
y al retirarse veo
que el cangrejo ya no está
se ha ido
se ha llevado mi pregunta
a lo más hondo del mar