Reseña de 108: Genocidio. Un libro de Rocco Carbone y Joel Cuenca

108: Genocidio, un libro de Rocco Carbone y Joel Cuenca

por Ezequiel Fernández Bados

Para poder entender de la mejor manera posible las realidades de los pueblos latinoamericanos hay que ubicarse en el marco de una operación política, económica y cultural llevada a cabo por la gran máquina de despojos, operada históricamente desde los centros, desde lo que hoy se autopercibe como “el primer mundo”. Y en este sentido, Paraguay es uno de los territorios más ejemplares del despojo, del asalto, de la imposición violenta del complejo de inferioridad, de la negación de la vida diversa. 108: Genocidio (8vo. Loco Ediciones & Trenenmovimiento, 2018), de los autores Rocco Carbone y Joel Cuenca, toma uno de los múltiples acontecimientos que caracterizan a este despojo: la persecución a la comunidad homosexual en la dictadura stronista.

¿Por qué 108? Porque 108 es un símbolo que nace de la persecución y el despojo. Un culturema que resulta de la caza y exposición de 108 presuntos homosexuales que el régimen dictatorial se encargará de “curar”, de “volver a hacerlos hombres” a través del encierro, la tortura y los trabajos forzados. Un símbolo que hoy ha sido expropiado por las comunidades consideradas por la heteronorma como “ciudadanxs de segunda categoría” para devolverlo a la cultura como una forma de resistencia. Un insulto. Una reivindicación. 108 es un símbolo que recupera parte de la dialéctica de la historia paraguaya. En 108: Genocidio, los autores dan cuenta de esta dialéctica y la inscriben contrapuntísticamente entre el asesinato de Bernardo Aranda y la caza de los 108 presuntos homosexuales y el Besatón, un besazo masivo de parejas diversamente deseantes en las puertas del Congreso organizado por el movimiento SomosGay que se realiza todos los años el 17 de mayo desde el 2010.

108 es un símbolo que ha sido sistemáticamente solapado, evadido, ocultado, omitido, en la historia paraguaya. No sólo se ha eliminado, por ejemplo, del registro del automotor (no hay patentes con el número 108), o de la numeración de las viviendas (no hay edificios cuya altura sea 108); también el acontecimiento que lo produjo no fue contemplado por los periódicos ni revistas de la época, no fue recuperado por los manuales de historia, no se ubica en los anaqueles del archivo histórico nacional. Este borramiento es también una forma de genocidio. Frente a él, es la literatura la que sirve como lienzo de esa memoria popular herida, perseguida, ninguneada. Y es desde la literatura que esta memoria organiza los colectivos sociales.

La literatura, una de las armas que tiene la memoria de los pueblos para combatir la aún no derrotada gran máquina de despojos. La otra es el amor, cada 17 de mayo, en la puerta del Congreso.

Para conseguir el libro en papel o virtual: https://www.el8voloco.com.ar/product-page/108-genocidio